Finalmente los dioses lo lograron,
le ganaron a Russell.
Crearon la proverbial piedra,
la que ni ellos pueden levantar.
Un ligero error de cálculo,
no por parte de Russell.
Una gran capacidad de observación,
no de los dioses.
En fin, al conseguirlo
le ganaron a Russell.
Se juntaron todos para festejarlo
una ocasión solemne.
En medio de la fiesta
interrumpió Nieztche,
soltando la piedra.
Liberando la tierra.
Los dioses han muerto,
dijo este hombre,
la culpa la tiene
su propia soberbia.
Recién salido del horno, me gusto la idea, aunque va a necesitar correcciones.
viernes, 27 de abril de 2007
lunes, 23 de abril de 2007
Confusión
Si yo muriese mañana
confusión seria mi epitafio
desorden diría mi lápida
revolución los libros de historia
alegría mis enemigos.
Que son tus enemigos,
que son nuestros enemigos,
que son los enemigos de todos.
Por eso mi amigo
en este momento tan duro
te pido que te encargues
de decir la verdad
que el que falleció fui yo,
un hombre;
pero mis ideas siguen vivas
porque las ideas no mueren
a pesar de lo que digan
los idiotas de turno.
Porque son tus ideas,
porque son nuestras ideas,
porque son las ideas de todos
y mientras existamos vivirán.
Poema de todos, es decir hay una frase de una canción de King Crimson y me ayudó un amigo para el final. Cba. 27/7/95
Suscribirse a:
Entradas (Atom)